El pueblo dominicano desde que logró su independencia ha sido un pueblo cristiano cuyos principios están en contra de la homosexualidad y de todo tipo de uniones entre personas del mismo sexo, eso lo describe la misma bandera y el escudo ,en cuyo centro está la Santa Biblia abierta. Por eso rechazamos la presencia de el embajador de los Estados Unidos de Norteamérica y de todo aquel que con sus acciones quiera dañarnos.
Ese señor de cuyo nombre no merece ser expresado, a quien le respetamos su estilo de vida, pero los cuales no compartimos ni mucho menos son de nuestro agrado.
En tal sentido de manera categórica rechazamos las reuniones que ha realizado con grupos de sus preferencias sexuales en nuestro país ,y por ende, respaldamos las posiciones del embajador dominicano en el Vaticano,periodista Víctor Grimaldi,quien en nombre de todo el pueblo y con mucha dignidad y decoro denunció las acciones que desde la embajada norteamericana realiza el enviado por el gobierno de ese país y por los daños morales que está causando a este país, aunque pequeño, pero grande en dignidad.
El comunicador y embajador ante el Vaticano se dirigió ante el santo padre con la verdad y presentándole lo que establece nuestra Carta Magna en su artículo 55 ,que establece que "la familia es el fundamento de la sociedad y el espacio básico para el desarrollo integral de las personas. Se constituye por vínculos naturales o jurídicos, por la decisión libre de un hombre y una mujer de contraer matrimonio o por la voluntad responsable de conformarla".
Esa actitud debe ser respaldada por la Cancillería y por el gobierno dominicano y no despacharse en contra de un defensor del pueblo dominicano en momentos en que el embajador de Estados Unidos en el país, James Wally Brewster, sostuvo una reunión con la comunidad gay y que fuera reseñada en los diferentes medios del país.
De ahí que hacemos un llamado al presidente de la República licenciado Danilo Medina Sánchez a que no se deje chantajear por asuntos de supuestas ayudas que pueda brindar un país al nuestro aceptarle todas las malas costumbres que tengan.
Esperamos que la dignidad, el decoro y el respeto al pueblo dominicano sea el norte de la presente y de las futuras gestiones gubernamentales, pues el embajador de los Estados Unidos fue quien ofendió a la República Dominicana y no nuestro embajador ante el Vaticano.
El embajador de República Dominicana en el Vaticano, Víctor Grimaldi, envió una carta al Papa Francisco en la que defiende al Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez y aseguró que hay una campaña de ataques en su contra.
También deploró una reunión con la comunidad gay que hizo el embajador de Estados Unidos en el país, James Wally Brewster.
En la misiva, Grimaldi citó el artículo 55 de la Constitución dominicana, donde establece que “la familia es el fundamento de la sociedad y el espacio básico para el desarrollo integral de las personas. Se constituye por vínculos naturales o jurídicos, por la decisión libre de un hombre y una mujer de contraer matrimonio o por la voluntad responsable de conformarla”.
Asimismo, asegura que la opinión de la Iglesia y todos los creyentes cristianos, el 99 por ciento de los dominicanos y dominicanas, fue tomada en cuenta por la Asamblea Constituyente revisora de la Constitución para establecer lo que indican esos artículos.
“Como en la República Dominicana la Constitución del Estado establece que el Matrimonio es de Hombre y Mujer, ahora el Nuevo Embajador de los Estados Unidos (“casado” con un hombre) se ha reunido con un colectivo gay y transexual que enfrenta a la Iglesia Católica y alega que el Estado Dominicano no es laico”, indicó.
El embajador del país ante la Santa Sede finalizó la carta diciendo que hace tiempo que existe una campaña de ataques contra el Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez por éste y otros temas.
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